El martes por la tarde el grupo de las 7 Joyas, ya previamente puesto en detalles, se encuentra en la Peluquería Ivoga de la calle Ibiza, colindante con Santa Catalina. Leny, a pesar de su juventud, lleva la cabeza afeitada. Pitaco la lleva al uno. Es decir, ambos son "peladillas". Mr. Steven va a llevar peluca porque se ha disfrazado de Doña Croqueta. Así que ninguno de los tres va a necesitar labor alguna en su testa.
El Restaurante Reina Mora ha preparado como tapa dos de sus especialidades, empanadillas de carne y hummus. El vermut y las tapas se servirán en la barra ya que las mesas están reservadas para los clientes que vayan a cenar, lo que provoca que la calle se llene de gente según van llegando los invitados.
Melania va directa a saludar a Manolito de Teba, vestido de Charlot, uno de sus personajes. Con él está un también amigo suyo, al que ella llama Jordi, que fue quien transcribió los mensajes de Toroldo, el profeta del futuro, en 6969: Delenda est Imbecillitas!. Melania tiene en gran aprecio a Jordi porque hace años, sin pretenderlo él y en el transcurso de una conversación informal, la curó de su "gustifobia masculina" (Gustifobia: malestar o nerviosismo provocados por lo que te gusta demasiado y produce incapacidad de afrontar o manejar situaciones que se desean).
Melania sale a la calle para ir a invitar a la degustación a dueños y empleados de los negocios vecinos. Primero se dirige a la tienda justo enfrente del restaurante, Skunk, un grow shop, después al restaurante ProSecCo y a la tienda de al lado Poc a Poc Artesania y completa la vuelta con Wasabi Sushi Bar y el bar restaurante La Golondrina.
Al rato llegan Claudio, el estilista, acompañado por Bita y por Clotilde Brodrigo yendo los tres al encuentro de Jordi.
Mr. Steven, que se encuentra al lado, interviene en la conversación "años antes yo también haber visto nirvana en váter de bar Ringo en Apuntadores".
Horrorizado Pitaco mira con ojos encendidos hacia Mr. Steven y es así como descubre que en el tarjetero hay entradas de la discoteca La Demente.
Interrogada la camarera le dice que los sábados abre La Demence y que en la misma plaza del Vapor también está Sabotage.
Hace años, dice Pitaco, que no he estado en La Demence y allí fue donde vi por última vez a mi ídolo La Purísima Lady Berlín, icono de la modernidad sexless (buscar en google). Este sábado vendré a cenar aquí y si Melania me quiere acompañar la invito, después iremos a la discoteca.
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